El blog donde ponemos una foto y en los coments se hace la novela. Escriban de a poco como para que sea copado y entre muchos hagamos algo interesante.Las fotos son encontradas, no recomendamos mandar tu foto personal ya que podes terminar empomado por tres marineros rusos y un imitador de Alcides. Lo que si podes mandar es fotos que encuentres en el ciber abandonadas. Cuanto mas bizarras mejor.
18.7.05
12 - Un brindis por los que no estan!
Ir de camping puede ser muy peligroso. Sobre todo en Glew. Eso fue lo que le pasó a Sánchez, y a su novia que se cree vampira el mes pasado cuando decidieron acampar en un lugar secreto re loco que descubrieron sus 5 amigos Piñote, Cajón, Cara con tajo, Verdura y Fresco y batata. Todo empezó bien hasta que un hermano gemelo de Luis Pedro Tony se apareció con una carabina y les dijo que estaban en propiedad privada, y que si querian seguir acampando ahi le iban a tener que convidar de la brochette. Pero Fresco no quiso convidarle por que la carne estaba adobada con alucinogenos, y como Juan Mario Tony (ese era su nombre) cargaba con una carabina, no era buena idea darle a probar ya que podría desencadenarle un tremendo panic atack, entonces, Sánchez, el máscapito del grupo, se puso el vinchón del poder, colgó su camperola de una rama y mientras se bajaba un vaso de ginebra (cuidando que su dedo meñique no toque el vaso, porque así es más paquete)les recitó un poema que dice así: Aaaachalay, my brothers beware con los ñanduses, morfemos sus caracuses, todos juntos ones con others! Todos aplaudieron menos siete ñandúes que estaban escondidos entre los yuyos, a quienes demasiado bien, el poema no les cayó. Inmediatamente, los avechuchos se pusieron en filita, cantaron el Hakka y se les fueron al humo a los cinco que se escondían en la carpa al grito de "qué lo parió, qué lo parió; esto es Glew, no el seven de Claromecó" En ese mismo instante volvió a aparecer en escena Juan Mario Tony con su carabina. "Estamos salvados!", gritó Sánchez, pensando que Juan Mario vendría en su auxilio. Pero no. Se equivocaba Sánchez, una vez más. Aunque si sumamos todo, la situacion era mas bien negativa. La frondosa vegetación no dejaba ver nada. Pero eso, a J.M. Tony no le importaba,porque pisó el acelerador y arremetió contra los pobres gurises. Todos salieron ilesos, pero al pobre Cara de Tajo se le hizo otro tajo, que empezó a chorrear sangre, lo que despertó los más bajos instintos draculines de la novia de Sánchez, que como buena vampira que es, se tiró de cabeza a la herida y se prendió de la misma como si fuera la de Sanchez, quien mientras tanto aullaba "¡Soltalo, yegua, que ese negro en serio no es más mi amigo!". Entonces todos empezaron a aplaudir al grito de "mueva mueva mueva mueva!" y Sánchez siguió indignándose y poniéndose muy colorado de la rabia y todos los demás lo miraban y reían. Ellos también estaban colorados pero por el torrente de sangre que salía del tajo nuevo de Cara con tajo... lo que no sabia la vampira, es que el cara con tajo, (que mas tarde pasaria a llamarse cara con tajos y mordida de vampiro pero en la intimidad le decimos adefesio) le da al ajo a lo loco, fatal para los vampiros y sus compañeros de carpa, y la pobre vampira (que en realidad tenía complejos de bati-chica) comenzó a convulsivar, escupía una sustancia verde pastosa con gusanos por la boca y la cabeza le giraba 360° mientras cantaba por lo bajo..."me gusta ese taaajooo, que ayer conociiii, me gusta ese taaajoooo. Sanchez, horrorizado ante la idea de perder un tajo por culpa de otro, decidió emprender un exorcismo que acabara con el endemoniaje de su amada, aunque tuviese que sacrificar la habilidad succionadora de su boquita de ultratumba. Para lo que corrió a la carpa, abrió el equipo evangelizador de emergencia y comenzó a ensamblar las partes de su exsorcista mecánico, recién importado desde la Alemania santopadrística: el inefable "Ratzinger Z" Pero ya era tarde, el guardia del campamento apareció bastante ofuscado y los cagó a todos a puteadas por el bolonqui que habían armado gratis. Uno sangraba, la otra expelía liquido verde, el otro armaba un sacerdote mecánico enorme. Eso indignaba a la buena gente de los alrededores que querían el camping para cantar en fogones, tomar birra y ver si podían ponerla aunque sea por accidente. Mientras tanto, los ñanduses que habían reculado presa del más espantoso desconcierto, fueron detectados por Ratzinger Z. Los del elenco se atrincheraron tras un tronco caído pero un poco separaditos entre sí, ya que les daba asquito juntar gusanitos, sangre, tierra del camping, guardia del mismo y restos de asado, desde ahi pudieron observar la sangrienta batalla entre el prelado cibertnetico y los cinco mamiferos cuellilargos. Al final los cinco ñanduses ganaron la apocalíptica batalla, se recostaron exhaustos y para sorpresa de todos, uno de ellos les habló y les dijo: "Aijuna...Fuente Ovejuna denme algo pa´l morfi que tengo mucha hambruna". Sánchez se quedó de una pieza y dijo "Oh! Un ñandú que habla!" a lo cual el plumifero respondió: "Pos claro! Es que sos pelotudo?" "Mirá ñandú, yo no soy ningún pelotudo, soy un tipo con muy buena voluntad", le explicó Sánchez algo ofendido. "Vení, acercate que estamos justo destapando un tetra, vamos a hacer un brindis por los que no están. Es más, faltan tantos, que si falta uno más, como decía el poeta, no cabemos. "Obvio, nabo, si detrás del tronco no hay más espacio!" gritó uno de los ñanduses.Todos se corrieron para el costadito, se agarraron una esbornia cirrótica, fueron felices y comieron perdices... pero los ñanduses no: les daba cosita comerse a otro pajarito. Ellos ingirieron los pedazos de Ratzinger Z, con un poquito del chimichurri ese hecho con alucinógenos. ¿Qué pasó después? Ah, esa es otra historia. ¶ 12:37 p. m.
